dotrina


EL QUE NO TIENE TEMOR DE DIOS


Salmos 36:1-4 LBLA La transgresión habla al impío dentro de su corazón; NO HAY TEMOR DE DIOS delante de sus ojos. Porque en sus propios ojos la transgresión le engaña en cuanto a descubrir su iniquidad y aborrecerla. Las palabras de su boca son iniquidad y engaño; ha dejado de ser sabio y de hacer el bien. Planea la iniquidad en su cama; se obstina en un camino que no es bueno; no aborrece el mal.
** ¿Puede alguien temer lo que desconoce? ¿Puede alguien escoger el no temer, si no sabe que hay a quien temer? Una persona impía es aquea que dejó la piedad, y la piedad es Cristo (1Timoteo 3:16). A diferencia del pecador, el impío si conoce del Señor.  En el “salmo 36:1-4” leímos de un impío, sin temor de Dios, a quien la trasgresión lo rodea, dejo de ser sabio (o sea que lo fue), dejo de hacer el bien (o sea que lo hizo) y esto por la transgresión, que es el volver a levantar aqueo que ya habíamos logrado vencer (Gálatas 2:18).
** En esta ocasión para estudiar este tema lo veremos de dos puntos de vista; primero los versículos que mencionan literalmente las consecuencias del NO tener temor de Dios y luego los versículos que hablan del SI tener temor de Dios, pero como el “tener temor” es una condición para la promesa, significa que al no cumplir esa condición el versículo se leería de forma negativa.
1.     El NO tener temor
2 Samuel 1:14-16 LBLA Y David le dijo: ¿Cómo es que NO TUVISTE TEMOR de extender tu mano para destruir al ungido del Señor? Llamando David a uno de los jóvenes, le dijo: Ve, mátalo. Y él lo hirió, y murió. Y David le dijo: Tu sangre sea sobre tu cabeza, porque tu boca ha testificado contra ti, al decir: “Yo he matado al ungido del Señor.”
**David tuvo la oportunidad de matar a Saúl (figura de un siervo de Dios, pero caído) en distintas ocasiones, pero no lo hizo por temor a Dios (1Samuel 24:6). El muchacho extranjero del versículo anterior no tuvo temor de Dios y mato a Saúl, como consecuencia el muchacho fue muerto, figura de una muerte espiritual para todo aquel que sin temor a Dios levanta su espada (la palabra de Dios) en contra de un siervo de Dios aun si ese siervo esta caída.
En “Proverbios 1:20-33 LBLA” la sabiduría, que es Cristo Jesús (1Corintios 1:24), manda a llamar a los simples, a los burladores, y a los necios. Les pide que vuelvan a su reprensión para que el espíritu sea derramado sobre ellos y así puedan conocer sus palabras. Pero se rehusaron a oír, desatendieron todo consejo y reprensión. Como no escogieron el temor del Señor la sabiduría; se reirá de su calamidad, se burlará de su temor, no responderá en la angustia, no la hallarán en la tribulación, comerán del fruto de su mala conducta, serán muertos por su desvió y destruidos, pero el que la escucha vivirá seguro y descansará, sin temor del mal.
Jeremías 2:19 LBLA Te castigará tu propia maldad, y tus apostasías te condenarán. Reconoce, pues, y ve que es malo y amargo el dejar al Señor tu Dios, y no tener temor de mí, declara el Señor, Dios de los ejércitos.
**Si no hay temor de Dios, la maldad lleva a la apostasía (Mateo 24:12) y esto al castigo y la condenación, según el versículo anterior el dejar al Señor y no tener temor es algo amargo.
Malaquías 1:6 LBLA El hijo honra a su padre, y el siervo a su señor. Pues si yo soy padre, ¿dónde está mi honor? Y si yo soy señor, ¿dónde está mi temor? —dice el Señor de los ejércitos a vosotros sacerdotes que menospreciáis mi nombre. Pero vosotros decís: “¿En qué hemos menospreciado tu nombre?”.
 **El no diezmar u ofrendar o el diezmar y ofrenda mal como los sacerdotes de Malaquías 1, es no tener temor de Dios, porque no ser reconoce como Señor a Jehová de los ejércitos. Estas son las consecuencias: Malaquías 2:1-2 LBLA Y ahora, para vosotros, sacerdotes, es este mandamiento. Si no escucháis, y si no decidís de corazón dar honor a mi nombre —dice el Señor de los ejércitos— enviaré sobre vosotros maldición, y maldeciré vuestras bendiciones; y en verdad, ya las he maldecido, porque no lo habéis decidido de corazón.

¿Cómo aprendemos a temer a Dios?
¿Cómo evitamos perder el temor de Dios?

2.     ¿Y si no cumplimos la condición de “temer a Dios”?
Ya estudiamos un poco el tema desde el primer punto de vista donde los versículos mencionan literalmente las consecuencias del NO tener temor de Dios. Ahora estudiaremos un poco los versículos que hablan del SI tener temor de Dios, pero como el “tener temor” es una condición para la promesa, significa que, si no se cumple la condición, el versículo se leer de forma negativa.
2 Samuel 6:9 LBLA David tuvo temor del Señor aquel día, y dijo: ¿Cómo podrá venir a mí el arca del Señor?
** Alguien que no tiene temor de Dios no le interesa tener “el arca”, no le interesa tener la presencia de Dios en su vida. ¿Nos estamos preguntando cómo hacer para que la presencia de Dios nos acompañe?
Proverbios 14:26 LBLA En el temor del Señor hay confianza segura, y a los hijos dará refugio.
** Los que no temen a Dios no están confiados, el antónimo de confianza es: desconfianza, inseguridad, indecisión. Al no tener el temor del Señor somos indecisos, inseguros y desconfiados.
Proverbios 10:27 LBLA El temor del Señor multiplica los días, más los años de los impíos serán acortados.
Eclesiastés 8:12 LBLA, Aunque el pecador haga el mal cien veces y alargue su vida, con todo, yo sé que les irá bien a los que temen a Dios, a los que temen ante su presencia.
** Interesantemente tanto los que temen a Dios como los pecadores pueden alargar su vida, pero no los impíos, que son aqueos que se apartaron del temor del Señor.
Proverbios 19:23 LBLA El temor del Señor conduce a la vida, para dormir satisfecho sin ser tocado por el mal.
** La falta de temor del Señor nos conduce a la muerte, a la turbación de sueño y el ser tocado por el mal.
Proverbios 23:17 LBLA No envidie tu corazón a los pecadores, antes vive siempre en el temor del SEÑOR;
Proverbios 14:27 LBLA El temor del Señor es fuente de vida, para evadir los lazos de la muerte.
** Si no tememos al Señor, terminaremos envidiando a los pecadores quedando atrapados en lazos de muerte.
Proverbios 15:16 LBLA Mejor es lo poco con el temor del Señor, que gran tesoro y turbación con él.
** En la falta del temor de Dios no hay contentamiento en lo material, se va hacia la acumulación de tesoros en lo físico (avaricia) o en lo ficticio (codicia) y con ello la turbación.
Hechos 13:43 LBLA Y terminada la reunión de la sinagoga, muchos de los judíos y de los prosélitos temerosos de Dios siguieron a Pablo y a Bernabé, quienes, hablándoles, les instaban a perseverar en la gracia de Dios.
** Sin temor de Dios no podremos seguir a nuestros ministros, recordando que ellos fueron enviados por el Señor para que crezcamos en todos los aspectos en aquel que es la cabeza, es decir, Cristo.
Proverbios 22:4 LBLA La recompensa de la humildad y el temor del Señor son la riqueza, el honor y la vida.
** Hay paga si tememos al Señor, Cristo Jesús viene con galardones para su pueblo que le teme. La búsqueda genuina del Señor si tiene recompensa.

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