Romanos 6:8 LBLA Y si hemos muerto con Cristo, creemos
que también viviremos con El.
Primero se debe morir para poder vivir en Cristo, ¿Cómo
morimos? ¿Queremos vivir con Él? Veamos otras 4 de entre otras formas de morir
que menciona la biblia. Es la muerte de ese “yo” para que viva Cristo en
nosotros:
Las primeras 4 formas que vimos la vez anterior:
1. Bautismo en agua. Romanos 6:4
2. Alcanzar la madurez (llevados por el espíritu) Juan
12:33
3. Rendirse a Dios Juan 19:30
4. Diezmo y Ofrenda Marcos 12:44
5. Por la fe
Hebreos 11:13 RVR60 Conforme a la fe murieron todos éstos
sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y
saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.
Cuando caminamos por fe, estamos muriendo para poder
vivir en su voluntad. Ellos no recibieron la promesa, solo la vieron de lejos
llegando a confesar que no somos más que extranjeros en esta tierra, esa fe nos
hará morir al “yo” para hacer la voluntad de Dios.
6. Haciéndose uno con
El
2Corintios 5:14 LBLA Pues el amor de Cristo nos apremia,
habiendo llegado a esta conclusión: que uno murió por todos, por consiguiente,
todos murieron.
La palabra “todos” solo abarca a los que estamos en
Cristo (2Cor.5:11-17), si estamos en EL somos nueva criatura, las cosas viejas
son muertas y una nueva vida emerge en nosotros.
7. La unción del
Espíritu Santo
Lucas 14:8 LBLA Ella ha hecho lo que ha podido; se ha
anticipado a ungir mi cuerpo para la sepultura.
La unción con aceite es figura del Espíritu Santo, cuando
la unción esta sobre nuestras vidas, estamos siendo llevados a morir a nuestra
vida, para poder decirle al Padre: no se haga mi voluntad sino la tuya, vive Tú
y no yo.
8. Bendecir
Hebreos 11:21 LBLA Por la fe Jacob, al morir, bendijo a
cada uno de los hijos de José, y adoró, apoyándose sobre el extremo de su
bastón.
El bendecir a otros es una señal de que estamos muriendo,
el “decir bien o bien decir o bendecir” a otros es una consecuencia de que
nuestro “yo” está muriendo. Romanos
12:14 Bendecid a los que os persiguen; bendecid y no maldigáis.
Gálatas 2:20 RVR60 Con Cristo estoy juntamente
crucificado, y ya no vivo yo, más vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la
carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí
mismo por mí.