Apocalipsis 1:1 La revelación de Jesucristo,
que Dios le dio, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto;
y la dio a conocer, enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan.
Vemos
que el libro de Apocalipsis o Revelaciones, explica su propósito: “Para mostrar
a sus siervos las cosas que deben suceder pronto”. Así mismo establece un orden
de esta revelación:
1. De
Dios
2. A
Jesucristo
3. Al Ángel
4. A
Juan
5. A Sus
Siervos
A partir del cumplimiento de la promesa de Joel
2:28 en Pentecostés (Hechos 2), entendemos que vivimos en los últimos tiempos, el
mismo Pablo explica a la iglesia de Corintios que les ha alcanzado el fin de
los tiempos (1Corintios 10:11), por lo que podemos decir que llevamos 2,000
años de vivir en el final de los tiempos y por lo tanto que las cosas que han
de suceder están “Prontas”.
Siguiendo el orden de Ap.1:1, vemos que la
cobertura (aceptar autoridad) nos trae un nivel nuevo de revelación el cual
debe de trasladarse para la edificación de la iglesia (Ap.1:3)
Mateo 24:36
En cuanto al día y la hora, nadie lo sabe, ni aun los ángeles del cielo,
ni el Hijo. Solamente lo sabe el Padre.
El día y la hora nadie lo sabía hace 2,000
años, pero ahora esperamos esa revelación del Padre al Hijo, del Hijo a los Ángeles
y de los ángeles a sus siervos.
Tesalonicenses 5:4 Pero ustedes, hermanos, no
están en la oscuridad, para que el día del regreso del Señor los sorprenda como
un ladrón.